La Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) comparte algunas recomendaciones sobre cómo realizar coberturas periodísticas éticas y responsables, que no alimentan la desinformación ni la histeria y el pánico colectivo y que está basado en el artículo «13 consejos de una edición de The Washington Post «, tomado del sitio: puroperiodismo.cl
- No dejar de escribir historias sobre el COVID-19
- Definir los términos en cada historia
Es importante traducir la jerga, algo esencial para las audiencias compuestas mejor un mensaje que suele ser muy técnico y que es relevante que incorpora en sus hábitos de higiene e incluso de interacción con otros.
- Utilizar las redes sociales de manera efectiva
- Buscar información sólida de expertos en enfermedades infecciosas y salud pública
El gremio debe mantenerse alerta ante las personas que intentan venderse como expertos cuando no lo son. Es clave que los periodistas generan puentes entre la ciudadanía y fuentes serias y creíbles que aportan información certera y no solo opinología.
- Cuando una información errónea se vuelve prominente, desmentirla inmediata y efectivamente
El periodista debe decir de inmediato que tal cosa falsa es falsa, especialmente en los encabezados. Proporciona una razón por la cual la falsedad se ha diseminado o por qué la gente podría creerla o por qué alguien la está promoviendo, para ayudar a las personas a entender por qué están viendo esta información errónea a pesar de que es falsa. Las historias que desmienten suelen ser las más efectivas si son simples y breves.
- Evitar el balance falso
No es necesario contar algún “otro lado” del coronavirus cuando el otro lado es el ridículo.
- Reconocer temores o incertidumbres puede calmar a los lectores
En lugar de decir “no te asustes”, mencionar que algunas personas están preocupadas, y eso es comprensible porque esta es una situación nueva y aún nadie sabe cómo terminará.
Pero luego de aquello, proporcionar la información confiable que de otro modo podrían no procesar por estar demasiado asustados.
- Explicar lo que no sabemos
- Tener cuidado con señalar a “los otros” como población en riesgo
Se recomienda compartir la información sobre quién está en riesgo sin implicar que tienen la culpa o que no son parte de la audiencia.
- Incluir contexto
Cuando sea apropiado, el periodista debe ayudar a los lectores a comprender cómo funciona el sistema de atención médica, cómo funciona la ciencia, cómo funcionan las publicaciones científicas, cómo funciona el sistema inmune o cómo funcionan los virus.
- Entrevistar a enfermeras, enfermeros y otros profesionales pertinentes
Los periodistas suelen citar a los médicos en lugar de a las enfermeras como fuentes expertas, incluso cuando la experiencia y el conocimiento de las enfermeras es más relevante. Especialmente con el control de enfermedades infecciosas, las enfermeras pueden ofrecer información crítica y perspectiva.
Infografía: https://infogram.com/covid-19-como-reportear-sin-generar-panico-o-histeria-1ho16vr98wl74nq?live